martes, 29 de julio de 2014

Tiempo de Mariposas



Acaricié, con mis palabras, las hebras doradas que la envolvían.

 - Abre los ojos, ¿Aún duermes?.

Era apenas un temblor, ligero, sutil, pero noté la vida latiendo bajo la capa que protegía su cuerpo.

 - Despierta, ya es la hora. 

No quería  apresurarla, sabía que debía  respetar su ritmo o no tendría  la fuerza necesaria para afrontar la jornada tremendamente dura y larga que debía encarar...pero era necesario despertarla, el reloj jugaba  en su contra.

 - Vamos, levanta, sé que puedes - la alenté y noté como se iba desperezando lentamente.

No sé si era dolor, miedo o inseguridad, lo que leí en su cara pero, sin duda, el esfuerzo por salir de su letargo era infinito.

Me miró confusa, fingiendo no entender mi preocupación; Decía  ignorar el  porque de mi presencia allí...pero su sopor había durado demasiado, unas horas más y tal vez sería tarde, demasiado tarde para el viaje.

Estiró incrédula, sus miembros entumecidos. 

Ves? Nada es imposible - le dije,y acompañé  sus pasos torpes hasta el gran espejo, para que pudiese contemplar su imagen.

 Ella, bajó la mirada, incapaz de reconocerse en el reflejo o tal vez avergonzada de su aspecto...

Me acerqué más a ella, con delicadeza infinita (tal vez rechazase mi contacto) y le susurré:

" Mírate, esta eres tú y eres bella. Tu valor se esconde bajo la sombra oscura que te contornea los ojos y tu fuerza se percibe en las marcas moradas que te adornan."

Ella se observó dudando...

- Vamos,  insistí,  llévate sólo lo imprescindible, el equipaje debe ser ligero y...toma, ponte esto - le dije, entregándole unas alas - ¿ No hueles ese perfume en el aire ?, es tiempo de mariposas.

Después, maquilló sus alas, las pintó de color verde esperanza y emprendió el vuelo.



Dos nuevos diseños de quemadores de incienso.

"Mariposa morada y Lirio"

Detalle del Quemador
"Mariposa morada y naranja"
Detalle parte posterior del quemador.

No hay comentarios:

Publicar un comentario