Sal de mar
para cerrar heridas,
suavizar cicatrices
y aliñar la vida.
Para reactivar las papilas
y recuperar los sentidos,
saborear de nuevo
cada instante
con la punta de la lengua,
con las manos...
Agua de rocío
para lavar las penas,
para sanar la tierra yerma
y permitir que germinen
nuevos sueños.
Para que,
hasta de la urdimbre
gris de las arañas,
broten las orquídeas
y florezcan en tu seno
las rosas sin espinas.
Luz de vida
que destierre las sombras,
los miedos, las rutinas,
que espante las tinieblas
y los lastres.
Que te inunde de fuerza,
que empape de energía
el cuerpo lánguido y cansado,
que despierte,
las mariposas dormidas
en tu vientre...
Piel de Gacela.
Bolso realizado por encargo para una gran amiga.
Para su confección, he utilizado diferentes pieles:
- Gacela en frente y solapa.
- Vaquetilla ( piel de vaca) en parte posterior, asas y correa.
- Serraje engrasado, en fuelle y tireta de las costuras.
- Pecari engrasado, forro y compartimentos interiores.
Espero que os guste, sobre todo a tí...Muac.